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domingo, 9 de julio de 2017

EXCURSIÓN A LA CANTERA EMILIA (LA UNIÓN)

Ayer sábado hicimos una visita a la Cantera Emilia, para tomar fotografías y recoger algunas muestras.

La Cantera o Corta Emilia se encuentra ubicada al oeste de la localidad del Llano del Beal (Cartagena), y es una de las explotaciones más emblemáticas y conocidas del distrito.

Desde el punto de vista mineralógico no encontramos nada destacable: galena masiva, pirita, cuarzo en cristales de hasta un centímetro, calcedonia y siderita de cristales pequeños.

Como la temperatura no fue muy elevada gracias a la brisa que sopló durante la mañana, pudimos disfrutar de unas tres horas de excursión recorriendo diferentes niveles de la corta y tomando abundantes fotografías del entorno.

En la actualidad el fondo de la corta ha sido transformado en un inmenso vertedero de escombros, imposibilitando la recogida de muestras en esa parte de la cantera cuyo destino creemos que será la colmatación casi total del vaso.

En la excursión participamos Juan Hernández Orea, Pedro Rubio y Juan Luis Castanedo, presidente de la SMM.



La primera anécdota de la mañana: uno de los vehículos de los excursionistas no arrancaba por descarga de la batería. En primer término Pedro Rubio y al fondo Juan Hernández Orea.


Castillete minero en las proximidades de El Llano del Beal


Otro de los viejos castilletes que se pueden ver en la zona


Juan y Pedro por el camino de acceso a la cantera


Vista de la corta


Coris monspeliensis, una planta muy frecuente en la zona.


Juan Hernández Orea y Pedro Rubio observando unas muestras junto al camino


Pedro junto a una gran tapenera o planta de las alcaparras (Capparis spinosa) que crecia en uno de los taludes


Caparrones o alcaparrones, los frutos de la tapenera.


Vista parcial de la corta. Al fondo los aerogeneradores del Sancti Spiritu.


En algunas terrazas crecen ejemplares de pino carrasco (Pinus halepensis)


Estériles en la zona sureste de la cantera


Geoda de pequeños cristales de cuarzo con calcedonia


Calcedonia recubierta de óxidos de hierro


Juan extrayendo alguna muestra de la pared de la corta


Un pozo situado en uno de los taludes reforzado con vigas


Detalle de la boca del pozo


Nido de araña desconocida en un matorral 


Fondo de la corta cubierto de escombros


Un pariente de las amapolas Glaucium flavum


Muestra con pequeños cristales de calcita


Pedro Rubio descendiendo de un nivel superior


Vista de los diferentes niveles del vertedero con el que se está colmatando la cantera


Frente del vertedero


Capa de cuarzo cristalizado cubierta de siderita


Pedro y Juan mirando un talud para intentar acceder a la parte alta


Vita de las escombreras de la corta y el vertedero


Galena masiva con cuarzo 


Cuarzo con calcita y óxidos de hierro


Galena con pirita y calcedonia


Calcedonia


Galena, cuarzo y greenalita


Abarrancamiento en los estériles. Al fondo el Mar Menor.


Los participantes tras regresar de la excursión. De izquierda a derecha: Juan Hernández Orea, Pedro Rubio y Juan Luis Castanedo.


NUEVAS FOTOGRAFÍAS DE UNA SEGUNDA VISITA 



Cuarzo recubierto de óxidos


Calcedonia sobre greenalita


Cuarzo con óxidos


Siderita sobre calcedonia azulada con galena


Cuarzo con siderita


El vertedero de escombros en que se está convirtiendo la cantera que acabará colmatándola y haciéndola desaparecer 


Escombros y basura. "Murcia qué hermosa eres".


La explanada en primer término es el segundo nivel del vertedero que colmata el fondo de la corta


Otra vista del vertedero. 
Suponemos que los patrigeólogos, de Murcia y del resto de España, no habrán considerado que la Corta Emilia pueda tener algún valor geológico y por eso no se han lanzado con toda su científica energía contra el vertedero ni contra sus promotores, como suelen hacer con los buscadores de piedras.


El vertedero está contribuyendo a la propagación de especies de flora alóctonas e invasoras. 
Ricino (Ricinus communis).


El salao (Atriplex halimus) está cubriendo el primer nivel del vertedero que ocupa el fondo de la corta.


Ahora una umbelífera autóctona (pariente del hinojo y las zanahorias) que crece en las terrazas de la corta: el turbai Thapsia villosa.


Imagen del fondo de la corta colmatado de escombros y residuos plásticos


Una grata sorpresa: en una oquedad de la corta un Búho Real (Bubo bubo) nos observa a unos 7 metros de distancia sin huir. La corta está sirviendo para que aves rapaces amenazadas y protegidas encuentren puntos de nidificación y reposo. Durante esta visita también estuvo sobrevolándonos un buen rato un Halcón Peregrino (Falco peregrinus) que mostraba mucha querencia por el lugar.


El intrépido Pedro Rubio trepando hacia niveles más altos.








































1 comentario:

  1. Hacía tiempo que no os veía de campo. Como siempre una buena clase de botánica pero echo de menos otras especies que no sean galena, pirita, calcita..... ¿no hay cosas rarillas?

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